El pasado 22 de Octubre tuvo lugar la primera batalla de robots gigantes. Se trata del primer combate de la historia, un nuevo y espectacular entretenimiento para muchos aficionados de los combates y de los robots. En su primera edición, los países de EEUU y Japón se enfrentaron por ver quién resultaba ganador. ¿Quieres saber el primer ganador de esta nueva modalidad de combates?.
Los robots llamados Eagle Prime (EEUU) y Kuratas (Japón) ofrecieron un gran espectáculo pero el ganador fue… ninguno de los dos. Lo importante según los organizadores de este evento no era el resultado. Lo realmente interesante es crear una nueva disciplina deportiva.
El combate ha tenido de todo, desde victorias de un sólo golpe hasta demoledores golpes que han acabado con parte del escenario como si fuera un videojuego, pasando por disparos a distancia y abrazos en los que se quedan atascados. Aquí tenéis un pequeño resumen de cómo ha sido el combate.
Resumen de la primera batalla entre robots
Como he dicho antes, se trata del primer combate entre robots gigantes. Unos mecanismos controlados por pilotos humanos apretando múltiples botones y palancas en las cabinas interiores llenas de cámaras de televisión.
El Eagle Prime (EEUU) mide entorno a los cinco metros de altura y pesa doce toneladas. Por su parte, el Kuratas (Japón) mide cuatro metros de altura y pesa cuatro toneladas. No obstante, lo importante no son las dimensiones. Lo importante fueron las diferentes rondas (Round) que hubo a lo largo del combate.
Round 1, Victoria rápida y confusa de Japón
Eagle Prime acabó cayendo ante el primer ataque del equipo japonés. Todo fue rápido y hasta un poco confuso, pero sí, el primer round apenas duró un minuto y fue para Japón. Sin gran resistencia por parte de los EEUU.
Round 2: abrazos amorosos
Después del rápido desenlace del primer asalto, llegó el turno del segundo. Aquí es donde pudimos ver más cautela por ambas partes. El Eagle Prime lo intentó con diferentes disparos pero no consiguió provocar mucho daño a su rival. Al final, después de unos segundos de respeto entre ambos, los robots empezaron a atacar. Un choque de trenes, donde lo más destacable fue que ambos se quedaron enganchados. La campana volvió a sonar para dar por finalizado un asalto con empate y sin un claro ganador.
Round 3: el turno de los efectos especiales
La victoria final fue para… ninguno de los dos.
El tercer asalto fue conquistado por el robot americano, no obstante, el resultado final fue un justo empate. Puedes pensar que el resultado fue aburrido. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Lo importante no era el ganador, lo importante fue la narración de la pelea, las apariencias de los robots y los efectos especiales (Made in USA). Se trata de abrir un nuevo negocio y pasión a la gente. Un deporte donde la pelea ya no cae entre dos personas, sino entre dos máquinas. En futuros eventos seguro que veremos más acción y un ganador más claro, de momento el único ganador fue el espectáculo y el entretenimiento.