¿Problemas de movilidad reducida? Google Maps tiene algunos trucos para ayudarte
Si pensamos por qué fue desarrollada Google Maps, muchos dirían que se buscaba una manera de ayudar a desplazarse a la personas. Y aunque este ha sido su objetivo principal, no todas las personas somos iguales. Es verdad que Google Maps ha logrado ser una de las aplicaciones más importantes para millones de personas.
Da igual que vayas en un vehículo, transporte público o caminando, gracias a la aplicación de Google siempre acabas llegando. Sin embargo, hay personas con movilidad reducida que no eran consideradas pro Google a la hora de desarrollar su aplicación. Hasta hace tan solo unos meses, Google Maps no disponía de rutas adaptadas para aquellas personas en sillas de ruedas o con una movilidad limitada.
Google Maps también ayuda a desplazarse a las personas con movilidad reducida
Si eres un usuario con problemas de movilidad o simplemente tienes curiosidad, Google Maps incorpora algunas rutas de movilidad reducida. Para poder localizarlas simplemente deberás buscar el lugar donde quieras llegar.
Cuando hayas seleccionado tu destino, llega el turno de pulsar sobre las opciones de la búsqueda. Allí te aparecerá un pequeño menú con diferentes opciones. Opciones tan variadas como por ejemplo: “caminar menos”, “menos trasbordos” o la posibilidad de acceder a rutas “accesible para sillas de ruedas”.
Una vez elegida esta opción, Google Maps te mostrará la ruta en la cual, el usuario puede acceder mediante silla de ruedas. Además, la aplicación también te muestra aquellas paradas o estaciones que se encuentran adaptadas para este tipo de usuarios. Pero la iniciativa de Google no termina ahí. La empresa americana busca opiniones y ayuda mediante Local Guides. Por último, Google acaba de anunciar que realizarán más de 200 trayectos para responder dudas y recibir sugerencias al respecto. Para acabar, señalar que se han agregado imágenes a Street View para reflejar cómo son estos lugares. De esta manera, los usuarios de este servicio podrán saber el estado de un camino antes de recorrerlo.